miércoles, 2 de enero de 2008

Un gran esfuerzo

Asistimos a la agonía del 2007, umbral del 2008. Que descansen en paz los más de quince mil muertos de Tabasco que murieron a causa del interés mezquino del gobierno y sus socios, que descansen en paz los muertos de Oaxaca y Chiapas, que descanse en paz el artículo 27 de la Constitución Mexicana, que descansen en paz, otro año, la Independencia y la Revolución. Que descansen en paz todos los muertos en 2007 a causa del hambre, de las enfermedades, de la guerra. Que descansen en paz todos los que murieron intentando llegar a otro país, los que se ahogaron en el mar o en el río, los que se quedaron en el desierto, los que mató la bala de algún marshal o algún ranchero con escopeta, gafas de sol y pecas en el culo. Que descansen en paz los luchadores sociales asesinados en 2007, los periodistas asesinados también. Que descansen en paz los nepalíes asesinados por los chinos y los chinos asesinados por los chinos. Que descansen en paz los niños asesinados por niños, los niños que murieron en la calle, en la basura, en el baldío, en las cloacas. Que descansen en paz los olvidados, las muertas y los muertos a causa de la violencia de género. Que descansen en paz las víctimas del terrorismo, todas, que descanse en paz, otra vez, la democracia, que descanse en paz la justicia. Que descanse en paz la memoria, que descanse en paz la dignidad. Que descansen en paz las víctimas de catástrofes naturales y no naturales. Que descansen en paz miles de hectáreas de la Amazonia, miles de kilómetros de litoral, que descansen en paz los glaciares. Que descansen en paz miles de especies de flora y fauna, padre nuestro, aquí en la tierra como en el mar. Que descanse en paz el oso polar del documental de Al Gore.

Que duda cabe, el año que se va ha sido un gran año, pero siempre se puede hacer mejor.

Un feliz 2008 lleno de buena ventura, el deseo de que se cumplan los proyectos, pero sobre todo el deseo de poder descansar en paz sin tener que morir para ello.